En Calidad se dice que todo lo que no se mide no puede mejorarse.
Los altercados de hoy día, sean parlamentarios, mitineros, tertulianos, sobre cualquier cosa ligada a la política, me han recordado a Hammurabi (1811 a.c.-1750 a.c.).
Hammurabi resolvió el conflicto étnico de su Imperio, compuesto de ciudades habitadas por gentes de razas distintas y culturas diferentes, promulgando su Código Hammurabi de origen divino. Lo grabó en piedra y lo colocó a la vista de todos, porque a todos obligaba. Al ser su origen divino nadie osaría discutir dichas leyes.